Llamera huele a leña, silencio, tradición, otoño, hierba recién segada; a más de uno, con seguridad, también a infancia, juegos y tiempos lejanos y felices.
En plena calle principal del pueblo, pero dando vista por la parte trasera a la verde vega de Boñar, se levanta Las Nogalas, pequeña pero recia casa de orígenes ya perdidos en la memoria.
Acondicionada con cocina completa - comedor, tres acogedores dormitorios y todas las comodidades necesarias, Las Nogalas asegura una estancia inolvidable en cualquier estación, así como un inmejorable punto de partida de numerosas excursiones hacia los cuatro puntos cardinales y para todos los gustos.